Sistemas de rompeolas flotantes y atenuadores de olas. Los rompeolas flotantes y los sistemas de atenuación de olas se utilizan para proteger las estructuras de marinas y puertos de las olas y las influencias externas. Estos sistemas funcionan para dispersar y obstaculizar la energía de las olas incidentes. Las características de amortiguación de las olas de los rompeolas flotantes varían en función del periodo y la altura de las olas. Tienen una retención del oleaje del 90 al 100% en formaciones de olas de periodo corto y medio. También muestran una amortiguación de hasta el 80% en olas de periodo largo que se producen en alta mar. Los FB son especialmente efectivos en entornos de oleaje suave.
Hay dos tipos de rompeolas aceptados y utilizados con frecuencia en el mundo. Estos rompeolas pueden definirse como tipo T y tipo U.
Los rompeolas tipo T se utilizan especialmente en cuencas con periodos cortos y alturas de ola de hasta 110 cm. Los rompeolas de tipo T pueden amortiguar las olas resultantes en un 90%. La anchura y la profundidad de la estructura a utilizar se determinan en función del análisis de olas y viento.
Los rompeolas tipo U se utilizan en mayor medida en la construcción y son los preferidos. Los modelos de rompeolas flotantes se fabrican en anchuras de 3 a 10 metros y profundidades de agua de 1,5 a 3 metros. El rompeolas flotante tipo U interrumpe la estructura mecánica de la ola que llega y absorbe su reflejo para crear una zona segura dentro del puerto. Las cortinas de faldón adicionales sobresaliendo por debajo de la plataforma flotante crean una fuerza al contrario de la mecánica de la ola e impiden el paso de la misma. Este tipo de rompeolas se utiliza en olas de periodo corto, medio y largo.
Los rompeolas flotantes son estructuras ecológicas. Los materiales utilizados son reutilizables y no emiten ningún gas nocivo ni generan residuos de corrosión. En comparación con los sistemas de relleno o apilados, este tipo de rompeolas no daña la vida natural circundante, la microflora de la zona ni las direcciones naturales de descarga. No suponen ningún peligro de contaminación medioambiental durante su construcción e instalación.
Los rompeolas flotantes también son más beneficiosos en términos de eficiencia financiera que los métodos convencionales. Como los costes son mucho más bajos que los de los otros métodos, el retorno de las inversiones se puede obtener en un tiempo mucho más corto. En comparación con los rompeolas de relleno convencionales, ocupan menos espacio, tienen un coste más bajo y se pueden utilizar como muelle o dique flotante sin necesidad de rellenos de atraque adicionales.
Los rompeolas flotantes se utilizan principalmente para proteger los puertos deportivos. Los barcos amarrados a los muelles de la marina se pueden anclar cómodamente. Los rompeolas flotantes también aumentan considerablemente la capacidad de las marinas, puesto que se pueden utilizar como atracaderos adicionales.
Estos rompeolas son también una parte importante de las estructuras de los puertos. Se pueden utilizar en muchos sectores, como refugios de pesca, instalaciones de carga de minas, puertos de pasajeros, piscifactorías, instalaciones para deportes acuáticos y prevención de la erosión costera.
El rompeolas flotante está diseñado en función de diversos datos técnicos. El mapa submarino del lugar donde se construirá el rompeolas, las distancias de la cuenca que producirán las formaciones de olas, la altura y longitud máximas de las olas, el viento y las cargas vinculantes son los elementos que se tienen en cuenta. El modelo de rompeolas más eficaz es el que se diseña en función de los datos técnicos.
Los sistemas flotantes de amortiguación de olas básicamente se fijan unos a otros por medio de cables de conexión y almohadillas de goma amortiguadoras. Los materiales utilizados en la producción se seleccionan sobre la base de 50 años de criterios de diseño y resistencia.
El hormigón resistente a los sulfatos de tipo marino se fabrica de conformidad con la alta resistencia a la presión. Las armaduras de acero galvanizado en caliente utilizadas en el hormigón son resistentes a la corrosión y contribuyen a la longevidad de la estructura. El núcleo de EPS utilizado en los rompeolas flotantes tiene una alta densidad y una absorción de agua de hasta el 3%. Tales estructuras de rompeolas pueden mantener una vida comercial de hasta 50 años.
El anclaje (sistema de amarre) de los sistemas flotantes de prevención de olas al lecho marino es una cuestión crucial que requiere cálculos sólidos, profesionalidad y experiencia. En general, la cadena pesada se conecta a los anclajes de hormigón situados en el lecho marino. Se fija a su posición en el agua mediante conexiones transversales y verticales.
